Un nuevo curso lleno de luchas:

Con el transcurrir de los acontecimientos, recortes que se suceden en educación y sanidad y un panorama cada vez más desolador para los que creemos aún en una educación y sanidad públicas, la asamblea de la facultad de medicina de la Universidad Complutense ha ido cogiendo más y más fuerza, participando activamente en todas las movilizaciones sociales en estos ámbitos.
Empezamos tarde este curso académico, y con pocas fuerzas, pero enseguida recobramos el aire y empezamos a agitar conciencias en la facultad. Nos encerramos en Noviembre con los de la facultad de veterinaria, en protesta por la elevación de las tasas universitarias y el ahogamiento a la universidad, y luego volvimos a nuestra facultad, convocando a una asamblea a la que acudieron casi 150 personas. Con tal tamaño de fuerza demostrada y teniendo en cuenta que apenas disponíamos de medios para publicitar nuestras demandas e inclusive nuestra existencia, convocamos a un encierro en la facultad la noche anterior a la huelga general del 14 de noviembre, en protesta por todo lo educativo y por la consecuente privatización de la sanidad. El encierro fue exitoso hasta límites completamente insospechados, con más de 150 personas de nuestra facultad trabajando esa noche por un futuro distintos. Al día siguiente participamos en todas las movilizaciones y terminamos la jornada yendo, espontáneamente y por cuenta propia, al Ministerio de Sanidad, a levantar nuestra voz de protesta allí. Pudimos recibir todos los aplausos de todos los viandantes que eran testigos de nuestra improvisada manifestación.
Y así seguimos hasta hoy, en que la "marea blanca" es cada vez un fenómeno más poderoso, y nosotros participamos con todos nuestros medios en él, y no dejando de lado en momento alguno los destrozos que se acomenten contra la universidad pública que hasta hoy habíamos conocido (que no era modélica pero al menos brindaba un acceso más fácil a los menos pudientes y una educación con baches pero de calidad).
Es por todo esto que podemos decir hoy día que nos sentimos infinitamente fuertes porque nuestras demandas son justas y es la justicia de nuestras acciones la que nos brinda la energía para seguir, pero también porque cada vez más personas de nuestra propia facultad comparten nuestra lucha.

¡La lucha es ahora!. ¡No dejes que nos roben el futuro!